¿Cuándo Vale la Pena Financiar?

Los brasileños ya están acostumbrados a hablar de financiamiento, ya sea para bienes raíces, automóviles, motocicletas. La pregunta es: ¿realmente vale la pena financiar un bien?

Financiar una propiedad puede no ser siempre un buen negocio, pero este tipo de negociación es una posibilidad para muchas personas de lograr algo que siempre han soñado, como su propia casa. En cualquier tipo de decisión financiera que involucre largos plazos, es necesario evaluar con mucho cuidado.

Entender qué es la financiación

El financiamiento no es más que la compra de algún activo a largo plazo, principalmente bienes más costosos, como casas, departamentos, automóviles, maquinaria industrial y agrícola e incluso recursos para negocios.

Es prácticamente lo mismo que un préstamo: el banco contratado paga el bien adquirido y el valor del bien se le pasa al contratista para que lo pague a plazos, ya más intereses y honorarios. Mientras el contratista está pagando por el bien adquirido, normalmente puede disfrutar de lo adquirido, aunque el bien no sea completamente suyo.

Un ejemplo es en el caso de la venta. Si la persona que financió un carro o una casa y quiere vender ese bien. Se requerirá autorización bancaria para la transacción y el banco transferirá la deuda al nuevo comprador. En este caso, es posible pagar la deuda en su totalidad en efectivo o asumir las cuotas de financiación.

Independientemente de ser el nuevo comprador, si no se pagan las cuotas de financiación, el banco puede recuperar el bien adquirido. Solo al final del pago de todas las cuotas, cuando se produce el descargo, el banco emite un documento que acredite la propiedad del bien al comprador.

Dependiendo del tipo de bien a adquirir, la financiación también puede cambiar según cada banco. El monto del financiamiento se puede reducir si el comprador tiene una parte que se puede ofrecer como pago inicial.

Para realizar una financiación es necesario presentar la documentación exigida por el banco, como documentos personales, comprobante de residencia e ingresos de los últimos 3 meses o 1 año y declaración de la renta, en el caso de trabajadores autónomos y entidades legales.

Financiamiento o préstamo

Para elegir si merece la pena contratar una financiación o un préstamo, realizando un pago en efectivo por la compra de un bien, es necesario tener en cuenta algunos factores. El interés es el detalle más importante. Lo ideal es investigar lo más que puedas para comparar las tasas de interés de diferentes bancos.

Compruebe también si existe la posibilidad de un descuento por pagar en efectivo. En ese caso, si es atractivo, es mejor pedir un préstamo y pagar la compra en efectivo. Otra opción para adquirir un bien es el consorcio . En él, las cuotas suelen tener un valor menor y, a simple vista, esto parece ser ventajoso.

Pero aquellos que opten por hacer un consorcio deben tener paciencia, ya que no hay forma de predecir una fecha en la que la persona recibirá el bien por sorteo. Si eres negativo, puedes intentar sacar un préstamo con instituciones confiables . Simplemente no vale la pena dejar los planes en papel… ¡organízate y ejecútalo!